lunes, 23 de noviembre de 2015

Oración de Un Guerrero




Nací siendo un guerrero, la vida fácil no está en mi destino, muchas veces he enfrentado y enfrentaré la espada enemiga mas no caeré por su peso, sólo caeré por el mío propio cuando no tenga brazos, piernas y un corazón para pelear.

Lucho todos los días contra mi propio corazón que aunque me aconseja a veces me traiciona y me hace olvidar mi destino, lucho por ser más fuerte y más hábil para enfrentar mi próxima batalla, lucho contra aquel que me desvía de mi camino, contra aquel que me hace creer que no tengo valor, lucho contra el que me ha herido y aunque a veces pierda juro que esa cuenta pronto será saldada.

Sólo escucho a mi instinto que me obliga a ser justo, no formo parte de un grupo ni me escondo bajo la sombra de quienes creen que pueden pensar, sentir, o hablar por mi. De mi boca se escucha el sentir de mi corazón, no necesito que se expresen por mi y cuando mi voz es tenue o se quebranta por alguna razón, mis ojos y mi mirada son suficientes para expresar lo que siento. Los ojos de un guerrero son el espejo de su alma y su espada la forma que toma el brazo para ejecutar los deseos de su corazón.

Me equivoco y muchas veces pero no temo aceptarlo, lo único que temo es no poder enmendarlo.

Lloro, es cierto, por qué no, si soy un simple humano pero creo que existe un Dios que me escucha y aunque yo nunca lo escuche a El puedo ver su manifestación en muchas cosas, muchas veces me creí perdido, muchas veces sin aliento y herido y justo antes de derramar mi última gota de sangre ese inmenso calor llenó de nuevo mi cuerpo dándome fuerzas para continuar viviendo. Ese es el calor que viene de alguien supremo que promete morada para aquel que luchó con justicia.

Por eso no temo morir, porque sé que tendré en dónde descansar por fin de ésta eterna lucha que inició cuando vi la luz por primera vez y que terminará cuando la observe por última, antes jamás será porque a lo único que temo es a rendirme algún día.

Este largo camino terminará solo cuando descanse en un prado verde con la mirada perdida en el azul del cielo, con mi espada a un lado y la satisfacción de haber tenido el valor de vivir y morir por lo que creí justo.



Gracias por pasar .................................................................................................................................................

.................................................... J

martes, 10 de noviembre de 2015

"síndrome de Campanita"

Recién llegada al diván del psicoanalista, la mujer Campanilla es brillante, destaca en su trabajo, triunfa profesionalmente, siempre tiene razón y descuella en el arte de superarse a sí misma. ¿Su talón de Aquiles? Una vida afectiva desastrosa.




Las Campanillas han abandonado su país imaginario para instalarse entre nosotros. Perfeccionistas y competentes, ocupan con éxito puestos de responsabilidad… Encantadoras y seductoras, saben impresionar y atraer a los hombres… Sera, que, el dramaturgo escocés Sir James Matthew Barrie, creador de la Tierra del Nunca Jamás, fue un visionario: “¿Se habría imaginado alguna vez que sus personajes Peter Pan, Wendy y Campanta se convertirían en auténticos arquetipos de nuestra época?”.






Campanilla: el nuevo arquetipo femenino






Encantadora y a veces insoportable, envolvente y cautivadora, ingeniosa y vivaz, pero ¡manipuladora y celosa también! Para estas Campanillas modernas, “los hombres raramente están a su altura” Los varios pretendientes que tiene a su alrededor creen ser los escogidos.
Ella parece decirles que “sí” pero en la realidad nunca se lo dice.
Precisamente, porque una de sus dificultades es poder elegir. Pero eso no es óbice para que se muestre despiadada frente a posibles rivales. Su comportamiento amoroso es también particular: Campanilla ciega a sus pretendientes, los hace soñar y embarcar en un viaje mágico…en el que la realidad no existe. Ella se enamora raramente y resiste al amor. Amar, para ella, es un signo de debilidad; por eso controla sus emociones constantemente. Y si en un descuido le llega el amor, Campanilla reprimirá sus sentimientos y desafiará a su elegido a que la conquiste. Su pretendiente tendrá que esforzarse todo y más… Y si no consigue complacerla… ¡Cuidado! Ella lo traicionará.




Una mujer cabreada



“Las Campanitas son cada vez mas numerosas” Se trata de un hecho social: las mujeres se han otorgado el derecho a triunfar y de comportarse como los hombres tanto en lo social como en lo afectivo. Y también se han permitido el derecho a la cólera, considerada tradicionalmente una emoción masculina. “Sin saberlo, las Campanitas viven en un estado de cólera… contra las personas que no las aprecian tal como son, contra quienes no las comprenden, contra la vida…”. Les hacen pagar a los hombres el hecho de que sus padres no las hayan querido.

Lo admitamos o no, la realidad es que a los hijos no se los educa igual que a las hijas. Y en algunos casos a ellos se les presta más atención. A tal punto que una niña puede desear haber nacido niño. Este es el caso de Campanita. Pero además, Campanita culpabiliza a su madre, porque tampoco la ha querido como ella lo hubiese deseado. Incluso a veces ve en ella a una rival. De pequeña se acostumbró a controlar sus sentimientos y a superarse para plantarle cara a la sociedad… Todo esto, ¡para valorizarse ante los ojos del padre!



Cómo romper la coraza


Detrás de una fachada de control total se oculta una persona con un profundo malestar. Esta mujer. “vive la vida como si dentro de ella hubiese otra persona”.

Para salir adelante, tendrá que rehabilitar a la pequeña niña que fue una vez y reparar el ámbito emocional. Bajo la cólera a menudo se oculta una gran tristeza y cuando se accede a ésta es también posible acceder a la alegría. “Para esto se requiere una especie de auto-maternidad, poner nombre a los sufrimientos y descubrir quién se es de verdad”.

En cuanto al miedo de amar, será necesario doblegarlo y aprender a disfrutar del amor. El primer paso es bajarse del pedestal donde ella misma se ha encaramado y consultar con un especialista. Un retorno a nuestro ser auténtico es siempre posible. Regresar a casa, como lo hace Wendy, requiere amor a sí misma, ¡la clave de cualquier relación amorosa con éxito!














GRACIAS POR PASAR ...